Mañana excesivamente calurosa para jugar al fútbol y más de 200 personas en la grada para presenciar el derbi local.

Comenzó el encuentro con un Pumarín bien asentado en su parcela y regalando la mitad del terreno de juego al Cova. El balón se movía por la línea defensiva azul pero el Puma no se inmutaba, en cuanto el esférico le llegaba a Jorge o a Pablo, saltaban los jugadores del Puma a realizar la presión, robar el balón y marchar a la portería defendida por Diego. Le estaban saliendo bien al Puma la presión sobre la línea de creación del Cova y estaban gozando de ocasiones, en una de ellas el colegiado dudo entre la amarilla y la roja en un agarrón a un jugador rojillo que se escapaba hacia la portería local.

A los diez minutos un despiste en una mala salida de Diego es aprovechada por el Pumarín para adelantarse en el marcador.

Al Cova, un partido más, le cuesta meterse en el encuentro y todo se pone favorable para que los visitantes se encuentren cómodos y realicen el partido que más le conviene.

A la media hora de partido tengo que abandonar el campo por asuntos familiares, pero según me cuentan mis amigos, en resto del encuentro fue un calco del comienzo y sólo el Puma ponía el fútbol en el Rabanal.

Siempre duele perder pero mucho más por goleada, en tu domicilio y en el derbi local. La afición del Cova se marchó muy dolida, ya que su equipo le había dado la espalda cuando más lo necesitaba.

Para resumir lo sucedido, y ya que sólo he visto media hora de partido, he llamado a varios socios del Cova para pedirles un titular que nos pudiera acercar al sentir de nuestros socios y el resultado es el siguiente:

– Peor imposible.

– Leyeron mejor el partido, me decepcionó el Cova.

– Ni un pase, ni un toque, ni un control. Así no vamos a ningún lado.

– Ahora les toca disfrutar a ellos y nosotros a jodernos.

– Patético y que reflexionen.

– Los culpables de esto somos nosotros, no hay que buscar en otro lado y algunos vuelven a las andadas y se auto-expulsan.

– El resultado lo mejor que nos podía pasar.

– Nos pasaron por la piedra.

–  Sólo hubo un equipo y Gusi dejó a sus compañeros vendidos.

-El Cova no entró en el encuentro, si no estuviésemos a principios de temporada pensaría que el partido estaba vendido.

– Caraja matinal en Los Castañales.

– El Cova fuera del partido, ni carácter ni actitud.

– El Puma se pasea en el Rabanal.

– Lamentable partido del Cova.

Prometo que no quité, ni puse, ni una letra, ni una coma. El futbol es de la afición, que es la que paga el espectáculo y esto es lo que hoy piensa la afición del Cova. Estos titulares son los que me pasaron algunos socios que llamé al teléfono de forma aleatoria.

Se  que es duro, pero es lo que hay.

Ahora toca felicitar al Pumarín, justo vencedor del encuentro y desearle suerte para el resto de temporada.

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