Mostramos una imagen captada en el partido de este fin de sanana y jugado por el primer equipo del Covadonga. En ella vemos al colegiado del partido con un portátil conectado a internet para hacer el acta del encuentro y enviarla al instante a la Federación Asturiana. ¡Cómo cambian las cosas con los tiempos!.
Hace muy poco se hacían a mano y aún ahora en categorías inferiores se siguen haciendo así.
Recuerdo, que en los años 70, había un colegiado un tanto adelantado a los tiempos que apodaban «el maquinona»; seguro que alguno de mi edad lo recordará con cariño. Este hombre, disponía de una maquina de escribir de gran tamaño, llena de una especie de grandes patas que marcaban letra a letra sobre un papel de calco el acta del colegiado. Recuerdo que «el maquinona» (siento no recordar su nombre) acudía a los partidos con una maleta que portaba su codiciada máquina y que le daba cierto prestigio dentro el colectivo arbitral. Ahora la imagen es bien diferente, aunque no se que dirán de esta cuando pasen otros 40 años
Se llamaba José Luis, creo recordar,y era de Pola de Siero. También se le conocía por «El Lecheru». A mi me arbitró varias veces en infantiles (ya llovió…) y era tan buena persona como mal arbitro, pero precisamente por eso se le podían perdonar sus errores
Ya podías tener una bronca con él durante el partido que incluso al finalizar el mismo se prestaba a llevarte en el Renault-4 («4 LATAS» se decía entonces) que tenía a donde lo necesitases. Todo un personaje
Yo también lo recuerdo, buen tipo, le gustaba mucho su labor. Había personajes muy célebres, recuerdo a Manolín un Chiquitín del Pontón o al Gemelu que como le faltases ibas arraglau que te terminaba acojonando porque hasta te ofrecía un par de hosties. Peo lo bueno de todo ye que luego tomaban algo contigo en la cantina del campo sin tantas diferencias como ahora. Creo recordar de otro que llamaban el Electricu
Perdón Manolín era del Rancho, me he equivocado
Coincido con Veterano, el arbitro al que hace referencia Gerardo era José Luis «el lecheru» colegiado de Siero, buen paisano y arbitro malisimo, cobro bastante por esos campos de dios y no «perres» precisamente.